domingo, 29 de noviembre de 2009

HISTORIA DE SANTAGONZA

Santagonza comenzó su andadura en 2006, como persona jurídica, porque como explotación ganadera esta ya es la cuarta generación en la familia de ganaderos de ovino de leche.
Todo comenzó cuando surgio el dilema de "vender las ovejas" o cambiar. El cambio enpezó a produccirse en 2004 cacando la explotación del casco urbano y comenzar a seguir un control exhaustivo de nuestros animales, partos, reposición, producción... No fue nada fácil, todos sabemos los costes que todo cambio conlleva, no sólo económicos, muchos dolores de cabez, noches a en vela dando vuelta a las cosas. Comienzas que si proyectos, licencias, suministro energético, expedientes de subvenciones, y sobre todo mucho trabajo, ya que cada día después de atender el ganado, había que ir a la obra. La gente del campo tenemos esa desgracia de que parece que tenemos que saber de todo y hacer de todo (gestores, albañiles, ingenieros, ganaderos, fontaneros, electrecistas, soldadores...). Comenzar de cero en el mundo ganadero sin tener absolutamente nada es imposible, y acometer cualquier proyecto mediante el sistema "llave en mano" o "cuando termines me llamas que te pago y me das la lleve" más imposible todavía; en este sector no hay costes que repercutir, somos el sector primario, por debajo no hay nadie; tú haces la infraestructura, la llenas de animales, les alimentas, las ordeñas, te llevan la leche (casi como un favor), y otros ponen el precio por tí.

El sacar los animales del casco urbano ya fue un cambio importantísimo. La nave que hasta ese momento la destinábamos a almacén paso a ser almacén y aprisco. Había sido construida en 2002. Ya no había que entrar entre los animales para darlos de comer, se sacaba bien el estiercol, y sobre todo el ordeño. La nueva sala de ordeño fue la que
aportó el más importante de los cambios. Pasamos de una sala en la que había que darlas de comer, donde entraban 16 ovejas de cada lado, y ordeñabamos ocho ovejas a la vez, a otra de 2 x 20 con veinte puntos de ordeño, sin dar de comer, salida rápida, amplitud, comodidad, limpieza, orden, con una sala de espera para 250 animales y empujador automático que animan a los animales a entrar a su sitio. Por si sirve de algo la marca es De Laval. Si os interesa, comentaremos el por qué de elegir esta marca.